Familia de escolar desaparecida en Sicuani teme que haya sido víctima de trata de personas

Su familia espera y ruega que no sea otro caso como el que ocurrió en mayo último con el pequeño Alexander, menor secuestrado y posteriormente asesinado por sujetos que lo mataron al verse reconocidos y descubiertos. Son más de dos semanas ya, que el paradero de Victoria es desconocido y la madre de esta niña de 13 años no sabe que más hacer para poder estar con su hija.

La familia de Victoria Alexandra Hacha Santos, una menor de edad de sólo 13 años, no ha parado de buscarla desde el pasado 06 de julio, cuando ella fue vista por última vez cuando iba para su colegio ‘Gaona Cisneros’.

‘Ella vestía un buzo verde con franjas blancas, colores de su institución educativa. Ella no aparece y ya hemos hecho la denuncia respectiva en la comisaría, se ha pedido el apoyo necesario, pero no hay interés de la policía, para aclarar la misteriosa desaparición de la menor’ dijo su hermana mayor, Rebeca Hacha Santos.

Según manifiestan los familiares de la menor desaparecida, ellos han hechos sus propias averiguaciones, con los compañeros de colegio y en si con todo el plantel educativo, pero nadie sabe nada.

Agregaron que aquel 06 de julio, que fue vista por última vez, Victoria Alexandra estaba tranquila y no habían tenido algún problema que pudiera significar que la menor fugó de su casa.

Por su parte, la madre de la menor, la señora Alejandra Santos Guerra, pidió a quien tuviera a su hija, la deje ir y que ella no iniciará ninguna acción legal, porque lo único que desea es tener a su hija con ella. ‘No le hagan daño a mi hijita, quiero que retorne para que siga sus estudios, tengo la esperanza de reencontrarme con mi hija, estoy tomando fuerzas aun mal de salud, para encontrar a mi hija. Por eso pido a mis amigos que me la liberen, no le hagan daño’ pidió entre lágrimas la progenitora de la menor.                    

La familia insistió en pedir a la policía que intensifiquen la búsqueda de la menor de edad, para poder hallarla aún con vida. Las sospechas de todos ellos se inclinan a que pudo ser secuestrada o raptada por lo que piden actuar y hallar su paradero lo más pronto posible.

Otra de las sospechas de la familia, es que la menor pudo caer en manos de tratantes de personas que la pudieron dirigir a Puerto Maldonado, donde podría estar siendo explotada laboral o sexualmente.